Quizás en alguna ocasión has visto por tu ciudad a alguien circulando de pie sobre una rueda. De entrada, te ha parecido imposible que alguien no solo pueda aguantarse sobre una sola rueda, sino que además pueda circular a una buena velocidad. Pues si, los monociclos eléctricos han llegado para quedarse y son cada vez más populares.
Su principal ventaja radica que con un peso y dimensiones muy contenidos, tenemos a nuestra disposición un práctico medio de transporte que además es económico y ecológico.
Con un monociclo eléctrico podemos realizar pequeños trayectos urbanos que nos harán la vida más fácil.
Por ejemplo, podemos tenerlo en el maletero de nuestro coche y no preocuparnos si aparcamos lejos de nuestro destino. O si vivimos lejos de la parada del tren o metro, podemos usarlo para realizar ese trayecto previo o posterior.
Además ni tan solo nos tendremos que preocupar de su peso, ya que tienen un modo de acompañamiento, en el que el monociclo eléctrico nos acompañará sin esfuerzo como si de una mascota se tratara.
Nos gustaría añadir también que la mayoría llevan elementos de seguridad como luces de posición y freno, para ser aún más visibles de noche.
Obviamente dominar la conducción de un monociclo eléctrico requiere de un poco de práctica, pero no más de unas pocas horas nos harán falta para dominar su manejo.
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